Tenía pensado en principio hacer un balance musical del año pero he cambiado de opinión después de leer ayer el que hice a finales del año pasado; y hay que ver cómo cambian las cosas en tan sólo 365 días. Por diversas razones, el balance de este 2009 es mucho más positivo que el del año anterior.
Han concurrido varios factores para que todo ello sea posible. Parece que el blog se ha asentado y es un lugar que la gente visita con agrado. He conocido personalmente a bastantes de los que pasan por aquí, lo cual es para mí algo genial. La idea es seguir cimentando esa amistad para que no se pierda. Puedo decir sin temor a equivocarme que he ganado un buen puñado de amigos/as.
Y personalmente, pues deciros que ha sido un año muy importante para mí. Una vez superada una experiencia que me tuvo ciertamente fastidiado unos meses, las cosas andan mucho mejor ahora fundamentalmente porque conocí a una persona que ha sido, sin duda alguna, la artífice de este cambio tan positivo. Ha pasasdo a formar parte de mi vida, y es mi pareja en la actualidad; así que puedo deciros que ahora mismo soy una persona feliz.
Siempre le estaré agradecido, asi que sirva este momento como público reconocimiento. Y nada mejor que con un tema que la ella le gusta mucho.
Los próximos días, aunque no muchos, me voy a tomar un descansillo, aprovechando las vacaciones. No me alejaré del todo, pero digamos que descansaré para así retomarlo con más ganas si cabe.
En estas fechas parece que todo el mundo se ve en la necesidad de desear todo el bien a los demás. De repente todos nos volvemos más buenos que nunca, y nos invade el espíritu navideño. Yo sólo quiero desearos que lo paseís bien, y que procuréis ser felices en compañía de vuestros más allegados. Os dejo un regalo de Papá Noel para que paseís por el desván a recogerlo. Espero que no os importe que sea el mismo para todos. Nos vemos en unos días.
Alrededor de dieciocho meses de grabación y producción dieron como fruto el álbum X&Y, editado en 2005 por los ingleses Coldplay, un trabajo con diversas influencias y que supuso éxito tremendo a nivel mundial, copando los números 1 de todas las listas, incluidas las del Reino Unido y Estados Unidos, a pesar de que para muchos críticos era inferior a su predecesor, A rush of blood to the head. Fue el álbum más vendido en el mundo en aquel año.
Un disco muy completo, en mi opinión el de mayor calidad de todos los publicados por la banda. Prueba de ello es la concurrencia en el misno de temas tan geniales como "Fix you", "Talk", "Speedof sound", "What if", "Square one" ... Todo un ramillete de excelentes canciones, a cual mejor.
"The hardest part" fue el cuarto single del disco. Un fondo de piano, unas guitarras suaves, y un discreto acompañamiento de batería arropan a esta bella melodía, dando como resultado un tema con el que Coldplay quisieron expresar su reconocimiento hacia la banda R.E.M.
Hoy en día resulta evidente que las radios piratas, en el Reino Unido, ayudaron decisivamente al auge del beat y también a la mayor difusión de movimientos como el underground. Frente al monopolio de la BBC, como emisora estatal y única dueña de las ondas radiofónicas, un puñado de disc-jockeys, la mayoría de ellos desconocidos, pero rápidamente famosos, pasaron a radiar programas nuevos, rompedores y dirigidos al público joven, desde plataformas marinas y barcos situados fuera de las aguas jurisdiccionales inglesas. Con potentes equipos, las radios piratas fueron muy pronto las grandes responsables del éxito de muchos grupos y de los números 1 decisivos entre 1964 y 1967.
Radio Carolina fue la primera gran radio pirata. Pero no fue la única ni mucho menos. La competencia entre ellas fue muy eficaz, mientras la BBC se veía impotente para frenar el fenómeno. Enseguida se especializaron en dar veinticuatro horas diarias de música, dedicando especial interés a los discos de la lista de éxitos y al lanzamiento de novedades. Con todo ello, en el año 67 llegaron a su máximo apogeo, lo que hizo reaccionar al gobierno y fueron ilegalizadas. Sólo Radio Carolina desafió la orden gubernamental y continuó emitiendo durante muchos meses, aunque terminó por perder toda su fuerza.
No es muy difícil imagimar a cuaqluier joven de la época escuchando algo como esto en la vieja radio de su casa.
En cierta ocasión ya lo cité cuando hice un post sobre Steve Winwood. No en vano este músico, compositor, cantante y guitarrista inglés formó parte de la mítica banda Traffic, además de tocar con un buen puñado de artistas de la talla de Spencer Davis Group, Jimi Hendrix, Rolling Stones,Eric Clapton, George Harrison, Fleetwood Mac, y alguno otro que no recuerdo ahora mismo.
Dave Mason compaginaba su trabajo como músico con sus propias composiciones. En el año 1970, mientras actúa con Clapton y graba con Harrison, edita su primer trabajo en solitario, Alone together, para muchos su mejor álbum.
Yo no conozco mucho de su discografía. Sólo sé que sus discos tuvieron un relativo éxito; pero en el baúl tengo guardado, junto a todos mis himnos, un tema que grabó en su disco Let it flow, del año 1977, y que supuso sin duda su mayor hit en solitario. Un tema acústico, con unos arreglos vocales exquisitos que hacen de ella una gran canción, una gozada para los oídos: "We just disagree". Así de genial sonaba en directo.
Aunque nacidos e impulsados por el punk, The Stranglers se encontraban entre éste como ideología y el rock como estilo de su tiempo, lo cual les proporcionó una sólida continuidad y un sonido propio. Su cercanía al punk, reflejada en unas letras plagadas de palabras malsonantes, les valió la censura inglesa.
Nacidos en 1974, y con cuatro décadas de carrera musical, son la banda más longeva que ha dado la música inglesa de todas las nacidas en la órbita punk de mediados de los años 70.
Tras un comienzo bastante mediocre con la publicación de su primer single, pronto enderezarían el rumbo con el primer álbum, Rattus Norvegicus (1977). Y a partir de ahí, una trayectoria musical, durante la cual grabaron un total de dieciséis discos.
Un momento clave de su carrera fue el cambio de discográfica, cuando la música del grupo se tornó más comercial y Epic Records se convirtió en su nuevo sello. El tercer disco de esa nueva época, Dreamtine (1986), lleva muchos años en el bául, y el otro día lo saqué para escuchar un tema que creo que no pasa de moda y que suena muy bien, después de trece años desde su edición. No en vano está considerada cmo una de sus mejores grabaciones, en opinión de los propios músicos, los críticos e incluso la discografíca. No obstante, no responíó ni de lejos a las expectativas.
El caso es que a mí me parece un tema genial y quiero compartirlo hoy con vosotros. Os dejo con "Always the sun".
Identificados con el punk por razones de origen, más que de sonido, The Jam fue una especie de reencuentro con el primitivo estilo mod de mediados de los años 60. Si la imagen punk venía dada por los vaqueros raídos y las camisetas desgarradas, esta banda británica, con su innata elegancia, fueron algo así como los dandies de finales de los 70 desde su aparición a finales de 1977.
Paul Weller (guitarra) y Rick Buckler (batería) crearon la base del grupo, a los que se les unieron posteriormente Steve Brookes (guitarrra solista), quien abandonó la banda al poco tiempo, y Bruce Foxton (bajo).
Ese año, 1977, publicaban su primer disco, In the city, en el que se encontraba el tema del mismo nombre, y que marcaba las líneas maestras del sonido del grupo, con claras influencias de The Who, sobre todo en lo que a guitarras se refiere.
Su discografía la componen cinco discos más, hasta 1982, año en que se disolvió la banda. Bastantes de sus temas tuvieron cierto éxito. Para finalizar esta entrada he elegido el que para mí es uno de los mejores, "That's entertainment", publicado dentro de su quinto álbum, Sound effects (1980), del cual djo Weller en una ocasión que era su mejor trabajo.
Heredera de las armonías vocales de grupos como Poco o Eagles, entre otros, esta banda australiana nació con un impecable sonido folk y country rock, lo que les hizo tener un gran éxito en Estados Unidos durante la segunda mitad de los 70, a pesar de no ser americanos. No en vano, ya eran afamados músicos en su país cuando formaron el grupo.
Debutaron en el 75, y tuvieron varios hits con temas como "Help is on its way", de su tercer álbum, Diamantina cocktail (1977); o "Reminisicing", de Sleeper catcher, su siguiente trabajo.
Sin embargo, yo los descubrí gracias a una canción que me encontré en su sexto disco, Time exposure, guardado en el baúl desde 1981. El tema al que me refiero es "The night owls", canción que abría el disco. Un tema con un aire algo distinto a sus composiciones anteriores y que me llamó la atención desde el principio. Entonces me sonaba genial, y ahora con el paso del tiempo me sigue sonando igual de genial.
Formado en Chicago en 1974, Cheap Trick representa seguramente la versión más comercial y de mayor raíz pop del heavymetal internacional de la época. Su personalidad, impregnada de americanismo en cuanto a cncepción musical y estética, fue la base de su éxito y también de su estabilidad durante muchos años, a lo que contribuyó la figura de su vocalista Robin Zender.
Fueron teloneros de grupos tan conocidos como Kiss, Boston o Kansas, debutando en 1977 con dos álbumes, Cheap Trick e In color. que contenía uno de sus primeros éxitos, "I want you to want me", al igual que "Surrender", editado en su siguiente álbum, Heaven tonight (!978); y "Dream police", en el cuarto. O sea tres discos consecutivos con un tema de renombre.
Tengo muy poco de ellos en el baúl, pero lo más significativo es un tema de 1988, que apareció en su disco "Lap of luxury". Una power balad, que se convirtió en número 1 de las listas, y que sirvió para relanzar al grupo y colocarlo en lo más alto de la esfera musical y comercial de los 80 y 90. Se trata de la canción "The flame", al principio acogida con reticencias por el grupo porque no estaba compuesta por ellos, pero que finalmente pasó a ser una de sus grandes señas de identidad, incluyéndola en todos sus conciertos.
Sintetizando formas y fórmulas comerciales, como el funky y el pop, los británicos Haircut One Hundred, liderados por Nick Heyward (guitarras y voz), que se mantuvo en la formación hasta 1983, debutaron a finales de 1981 con el éxito instantáneo y fulminante del single "Favourite shirts (boys meets girls)", número 4 en las listas británicas.
Esta canción estaba incluida en "Pelican west" (1982), el primero de sus dos únicos álbumes, junto con "Paint and paint" (1984), éste ya con el percusionista Mark Fox como vocalista tras la marcha de Heyward. Tuvo menor acogida que el primero entre otras cosas porque aquél contenía su mayor éxito, "Love plus one", que les colocó entre las novedades más importantes del momento, poniendo de manifiesto su frescura, su originalidad y el tono innovador de su música, lo cual supuso una apertura de nuevos caminos para el pop inglés de los 80.
Tal y como anunciaba Without hace unos cuantos días, hoy se cumplen ocho años de la muerte de George Harrison. Mi beatle favorito siempre ha sido Paul McCartney, ya lo he comentado en más de una ocasión. Sin embargo, también por George siempre tuve una gran admiración, a pesar de estar en un segundo plano, por detrás de Lennon y McCartney. Además supo aceptar ese papel con gran dignidad. El Beatle callado le decían.
Poco a poco, sus temas fueron cobrando protagonismo en los discos de los Beatles, sobre todo a partir de la segunda parte de su discografía. Y nos dejó unas cuantas joyas musicales de gran calidad, tales como "Something"o "While my guitar gently weeps", por citar algunos. De su discografía posterior, me quedo con "My sweet Lord" (ya conté una vez que tengo en el baúl el single original, de 1970) o "Blow away", entre otros.
Ahora bien, si me dieran a escoger un tema entre todos los que compuso, eligiría sin dudarlo "Here comes the sun", en mi opinión su mejor canción, integrada además en el que para mí es el mejor disco de los Beatles, Abbey Road, tal y como manifesté al conocer el resultado de la encuesta que propuso Wood en su blog sobre el mejor álbum de los de Liverpool, y del que se cumplió hace poco el 40º aniversario de su publicación. Un tema que curiosamente no grabó Lennon con el resto del grupo por estar convalenciente de un accidente de coche. Me encanta el mensaje de esta canción. Harrison lo escribió después de tener una mala racha aquel año.
Como se suele decir, por mucho que llueva, el sol siempre termina saliendo entre las nubes.
A comienzos de los años 70, coincidiendo con el nacimiento de un gran número de bandas de rock, entra en la esfera musical el grupo canadiense April Wine (siempre me gustó ese nombre).
Lo que comenzó como sonido más bien popero fue evolucionando hacia formas heavy hacia la mitad de la década, durante la cual grabaron ocho álbumes, entre April wine (1971) y Harder... faster (1979).
Precisamente lo que yo conozco de ellos data de justo dos años despúes, cuando publicaron The nature of the beast, seguramente su disco más comercial, cuyo índice de ventas fue bastante importante. Lo encontré el otro dia en el baúl buscando música de los setenta y de los ochenta que hacía tiempo no escuchaba.
Para ilustrar esta entrada os dejo la que para mí es la mejor canción, no sólo de ese disco, sino seguramente de toda la discografía de April Wine, uno de los singles que se publicaron en su día. Forma parte de mi colección de canciones y me apetece cmpartirla con vosotros/as. Se llama "Just between and me", una balada con sonido clásico de los setenta que no suena nada mal, por cierto.
Hace unos días escuché que venían a tocar a Madrid los Porcupine Tree, grupo de rock británico formado por Steve Wilson en 1987. Siempre se les ha asociado tanto al rock progresivo como al psicodélico. En mi opinión tienen un estilo bastante personal, no sé si se pueden etiquetar como tales.
El caso es que me sonaba que yo tenía guardado en el baúl algo de ellos, así que ayer me puse a buscar y, en efecto, encontré un disco suyo, concretamente el séptimo de su discografía, In absentia (2002). Y al tenerlo delante de mí, rápidamente me vino a la cabeza el sonido de un tema que a mí siempre me ha sorprendido por sus tremendos contrastes, "Blackest eyes". Lo que empieza tras una pequeña introducción como un tema que podría calificarse como heavy, se transforma inmediatamente en una canción dulce y bastante agradable a los oídos; si se escucharan las dos partes por separado, jamás diríamos que pertenecen a la misma canción. Este mismo efecto se vuelve a repetir más adelante, de tal forma que termina como empieza.
También me dio tiempo a investigar sobre sus últimos trabajos, les había perdido un poco la pista. Resultado de mis indagaciones es el recate de "Time flies", un tema de su úlitmo álbum, "The incident" publicado por la banda este mismo año. Está compuesto por Wilson, como la mayoría de las canciones del grupo, y trata del paso raudo del tiempo, cada vez más rápido conforme nos hacemos mayores.
El omnipresente sonido de la guitarra acústica sirve de fondo a un buen tema, melódico y sencillo, con un final algo más potente, todo ello bastante en la línea del ambiente sonoro de su estilo músical.
Hoy os presento uno de mis últimos descubrimientos. Se trata de Mesh, un grupo que se formó en 1991. Está formado por Mark Hockings, Neil Taylor, y Richard Silverthorn, todos ellos teclistas y programadores.
Les lanzó a la fama una revista musical que publicó en uno de sus discos de recopilación tres temas de la banda. Poco después montaron su propia discográfica y editaron un EP, Fragile, en 1994. Y a partir de ahí han desarrollado una carrera musical que ha producido una extensa discografía, con un buen puñado de álbumes.
A pesar de que a mí no me gusta mucho la música electrónica, los descubrí por este tema en concreto que os pongo hoy. Me falta mucho que escuchar de ellos todavía, pero al menos esta canción me suena bastante bien. Ya os contaré.
El grupo Sheep, formado por John Watts (vocalista y guitarra) en 1977, fue la antesala de Fischer Z, gracias a varios anuncios publicados en la sección de demanda de músicos, con lo que completó la banda junto a Steve Skolnik (teclados y voz), Steve Liddle (batería) y David Graham (bajo).
Debutaron el 1978 y publicaron un total de nueve álbumes hasta su disolución, mientras Watts publicaba discos en solitario.
En su segundo trabajo, Going deaf for a living (1980), caracterizado por una mayor presencia de las guitarras, en comparación con el primero, en el que destacaban más los teclados, y con letras más refinadas, encontré una canción que, aún con el paso de los años, me sigue gustando mucho escuchar de vez en en cuando. Me estoy refiriendo a "So long", uno de sus temas más conocidos. Sonaba, y suena, así de bien.
Por cierto, esta es mi entrada nº 300. Aunque ahora no publico a diario, esto sigue avanzando. En fin, veremos cuánto dura. De momento, me encuentro con ganas de seguir; eso sí, con calma y sin agobios. Y por supuesto con la ayuda de todos los que le dais vida a este lugar. Gracias.
Tras un duro e intenso aprendizaje en plena ola punk, un EP llamado Packet of three, producido por John Cale para una discográfica independiente, fue el detonante de la carrera musical de los británicos Squeeze, formados en 1974. Tal éxito les llevó a grabar su primer disco, Squeeze en 1978, convirtiéndose en pioneros de la new wave.
Después de dos relativos éxitos más, su gran año fue 1979, con el LP Cool for cats, del que se publicaron varios singles, como "Cool for cats" o "Up the junction".
A partir de 1980, el grupo consolidó su línea con los álbumes Argy bargy (1980) y East side story (1981). Este último trabajo, quizá el más conocido de la banda, se grabó bajo la producción de Elvis Costello un año antes de su primera ruptura. De ese álbum destaca por encima del resto de temas que lo componen la canción "Tempted", segundo single del disco e interpretada por Paul Carrack, quien era el vocalista de la banda por aquel entonces.
El año 1977 vio nacer a esta banda británica que se encuadró en aquel invento que se llamó synthpop. Después de más de treinta años. sólo Philip Oakey se mantiene de su formación original, período durante el cual han grabado nueve discos de estudio y publicado veintiséis singles, que no está nada mal.
De las canciones que tengo de ellos en el baúl, para ilustrar esta entrada he elegido "Human", primer single de su disco Crash (1986). Fue todo un éxito, comparable a su conocido tema "Don´t you want me", las dos canciones mas renombradas del grupo. El éxito de "Human" les vino bien, porque a estas alturas de su discografía andaban un poco de capa caída.
Aquí teneís el vídeo de la canción, un buen trabajo por cierto. Sonido y estética ochentera en estado puro.
Hoy hace un año que evánder tuvo a bien invitarme a inaugurar su sección "Colaboraciones", recuerdo que para aquel momento elegí un tema de Bryan Adams, más que nada porque se que a él le gusta y me pareció una gran forma de agradecerle su confianza en mi. Durante este año han sido muchas y muy buenas las colaboraciones que ha tenido este blog. Y hoy un año después los cuatro mosqueteros de los 80 hemos querido celebrarlo compartiendo con vosotros un tema de aquella década que más nos gusta o que más especial es para nosotros.
Without la ochentera más rockera: un tema de los 80 total imprescindible para mi, es el Bad Medicine de Bon Jovi!!!!!. En en esos años me encantaba ese estilo de metal y fue junto con Poison y Helloween, de los primeros grupos que me encandilaron.....este tema pertenece al "new Jersey" de 1988! Y por lo que significó para mi en aquella época hoy quería compartirlo con evánder y todos vosotros.
Bon Jovi - Bad Medicine
Eden, La guardiana de los 80: Aunque con mil cosas por hacer y poco tiempo para hacerlas no quería perderme esta celebración y para ello pues sin duda que me quedo con Strays Cats y su "Lonely Summer Night"; por ser una de las bandas de los 80 que revivió el buen y viejo Rock and Roll,en este caso no es del todo rockera, pero me encanta y emociona. SALUD Y ROCK AND ROLL !!!
Stray Cats - Lonely Summer Night
Palabra de Chapu: "Corrían los ochenta, en plena movida madrileña, surge una banda torera, castiza y con influencias de lo más variopintas, destinada a dar un toque de originalidad al pop-rock que se estaba haciendo en España. Todos ellos provenientes de otras bandas de la movida crean Gabinete Caligari, tomando el nombre de una película expresionista alemana. Tras sus éxitos con Que Dios reparta suerte y Cuatro Rosas, hacen un disco más influido por el pasodoble y el costumbrismo local. Este tema es un himno de esa nuestra generación de los Ochenta, donde el calor del bar, nos marcó. Ese jefe...sirvanos una copita más...y hoy más que nunca para brindar con nuestro amigo Evander, por su aniversario, por abrirnos su Desván y sus momentos musicales favoritos. Ya ves que aunque tarde aquí va una pequeña colaboración, que no será la última... "
Gabinete Caligari - Al Calor del Amor en un Bar
Simplemente Livy: Son tantos temas, tantos grupos y tan buenos que es difícil, pero por la ocasión que es, una celebración, pues sin duda un tema que quizá no ha pasado a la Historia de la música con mayúsculas, pero sí ha pasado a formar parte de la historia del lado más salvaje y juerguista de la Livy ochentera, Fiesta de The Pogues y cada vez que escucho este tema pues inevitable que me ponga a bailar a saltar y a recordar la cantidad de veces que mi hombro me dijo: deja ya de saltar y chocarte con otros hombros, ten piedad!!!!.... Así que a ritmo de Fiesta, te digo: Evánder, Gracias y a celebrar.
Hace ya bastantes años que descubrí a esta cantante califormiana, y me encantó su forma de entender la música, importada directamente del más puro estilo blues. Por eso guardé en el baúl aquellos temas que más me gustaron.
Ciertamente sus primeros discos estaban repletos de blues, pero también de rock, folk y country. De esta forma, publicó un buen puñado de discos; aunque bien es cierto que sus éxitos llegaron cuando, después de ocho o nueve álbumes, su música se volvió más comercial, más accesible al público en general. Esto ocurría a finales de los 80 y principios de los 90.
Y en aquella época, concretamente en 1991, fue cuando publicó su undécimo trabajo, Lucky of the draw. En él se encuentra uno de sus temas más famosos, "Something to talk about", una canción compuesta por la canadiense Shirley Eikhard, y que cosechó bastante éxito en su momento. De hecho con este tema, Bonnie Raitt ganó el Grammy a la mejor interpretación femenina en 1992, por delante de cantantes como Mariah Carey o Whitney Houston, por ejemplo.
De las dos versiones que tengo de él, os dejo la del directo. Me gusta más que la de estudio (cosa bastante habitual en mí, como ya sabréis).
Me hubiera gustado haber aprendido a tocar el piano. Y digo me hubiera gustado porque, anuque ahora quizá podría hacerlo, no creo que lo haga ya. La verdad es que nunca es tarde, aunque estoy seguro de que ahora me costaría muchísimo más que cuando era más joven. Pienso que las cosas hay que hacerlas a su tiempo.
Y hablando del piano, a lo largo de la historia de la música ha habido geniales pianistas. Y por supuesto, en la música moderna no iba a ser menos. Lógicamente cada cual tendrá sus preferidos. Uno de los míos es, sin lugar a dudas, Rick Wakeman, además por varias razones.
Como instrumentista es un fuera de serie, eso lo sabe todo el mundo. Está considerado como uno de los más grandes de todos los tiempos. Desbancó a Keith Emerson del cetro como número 1 del mundo. Sus orígenes musicales provienen de la música clásica, comenzando a tocar el piano a los cuatro años. Pero además, como músico es un gran compositor de piano y de canciones. Empezó como músico de estudio, trabajando para gente como Cat Stevens, T-Rex o David Bowie. De todas formas, debe su fama a su paso por el grupo Yes, donde se ganó el apodo de "el brujo de los teclados", debido a su cabello largo y rubio, sus capas brillantes y su personalidad. Aún así, lo más destacable en mi opinión es que fue pionero en el uso de los sintetizadores, así como la combuinación de la música rock con la orquesta, incluso con los coros.
Como se suele decir, una imagen vale más que mil palabras. Aquí teneís una muestra de lo que este genio de los teclados es capaz de hacer.
¿Sabéis lo que os digo? Que voy a poner un piano en el desván; así, igual me animo. Y de paso, cuando mi quierda amiga Livy se pase a visitarme, podremos tocar algo con el piano y la guitarra. Ya os contaré.
Los responsables de una buena parte de la música australiaina de corte internacional desde mediados de los 70 fueron los autores-productores George Young y Harry Vanda, ambos miembros del grupo The Easybeasts. La creación de Flash & the Pan fue uno de sus aciertos más notables a finales de esa década.
En el año 1978 se hablaba mucho de las producciones de sus nuevas estrellas, John Paul Young y, especialmente, AC/DC (Young es hermano de Malcolm y Angus Young), cuando grabaron ellos mismos una canción que se convirtió en un éxito memorable en Australia.
Al año siguiente, publicaron por fin su primer álbum, Flash and the Pan, mostrando su talento e integrándose en las corrientes de la new wave. Y en 1980, Lights in the night fue su afianzamiento definitivo.
Ahora bien, el tema por el que todo el mundo identifica a este grupo es "Waiting for a train" publicado en su disco Headlines (1982), en su día número 7 en las listas británicas. Así sonaba:
Es casualidad que dos entradas consecutivas lleven la palabra Sunday en su título. La anterior tenía su porqué evidentemente; pero ésta es producto del azar, y su origen está en la información que escuché ayer en nuestra tele autonómica.
The Sunday drivers es un grupo de unos "paisanos" míos de Toledo, que acaban de publicar su quinto disco, llamado The end of maiden trip. Confieso mi ignorancia sobre ellos así que he investigado un poco. Y me he enterado de que surgieron en 1999, que sus letras son en inglés, que han ganado varios certámenes, que fueron teloneros en España de grupos de la talla de Wilco o los mismímos Coldplay, y que han cosechado bastante éxito en sus giras por varios países europeos.
Tienen página web, que podeís visitar en el enlace anterior, y también tienen su My space. Así que, si os interesan, allí encontraréis bastante información sobre ellos.
No sé lo que guardaré de ellos en el baúl. De momento, me ha gustado mucho su últmo single, "My plan", que cuenta además con un curioso vídeo. A ver qué os parece a vosotros esta gente.
Apenas habían transcurrido cinco o seis meses de la separación de The Smiths, cuando Morrisey sacaba su primer trabajo en solitario, el álbum Viva Hate, en 1988. Todos esos años lleva este disco guardado en el baúl, fundamentalmente porque contiene el tema "Everyday is like Sunday", para mí una de sus mejores composiciones, includos los temas de su anterior formación.
Es evidente que el disco suena a The Smiths por todas partes, además de estar impregnado del particular estilo de escribir de Morrisey, con letras sardónicas y hasta violentas a veces.
Este tema fue el segundo single que se editó, catapultando el álbum directamente hasta el número 1 de las listas británicas. Tiene una melodóa que me encanta. De esas canciones que te dejan un buen sabor de oído, si se me permte la expresión. En definitiva, un temazo, en mi opinión. Una canción que está entre las favoritas de mi colección de canciones.
Ésta ha sido una semana dura, que comenzó como ya sabéis los que pasáis por aqui habitualmente. Además, he tenido bastante curro; así que hoy, por ser viernes, me apetece poner algo alegre, sin más imtención que escucharlo y divertirme con su música. Tengo unas cuantas de esas en el baúl para determinadas ocasiones.
Número 1 en las listas de éxitos, y publicada como primer single de su disco Freeze frame (1981), su duodécimo trabajo, esta canción de la banda americana J. Geils Bandes de esas que invitan a bailar y pasarlo bien.
No quiero cansaros con más palabrerío, así que os dejo con la canción.
Cuando oímos hablar de Murray Head su nombre suele venir asociado a su gran éxito "One night in Bangkok", publicado en el año 1984 para el musical Chess. Supongo que todos lo conoceréis. El tema no era suyo, pero lo hizo superconocido.
Pues bien. Su historia arranca mucho tiempo antes. Autor y cantante inglés, fue actor en películas como Sunday, bloody Sunday, e intérprete de la versión original de Jesus Christ Superstar en el papel de Judas.
Quizá alguien se estará preguntando qué pinta esto guardado en el baúl. Bueno, pues lo tengo porque en 1975 publicó un disco, su segundo álbum de un total de cerca de veinte, llamado Say it ain't so. En ese disco aparecía una canción que llamó mucho mi atención y que desde entonces está colocada en la sección de Mis himnos.
Para nada seguí su carrera musical, pero me quedé con aquel tema y todavía lo conservo. Así que cuando oigo hablar de Murray Head, en vez de One night in Bangkok yo me acuerdo de esta melodía, "Say ain't it so, Joe".
Hoy no tengo muchos ánimos musicales. Ayer recibí una noticia que me dejó helado, a pesar de que entraba dentro de lo posible. Uno de los músicos que tocaba conmigo, o yo tocaba con él (no sé cuál sería la expresión más exacta) en nuestro primer grupo, Toño, Toñito para nosotros en aquella época, fallecía después de varios días ingresado en el hospital.
Si bien es cierto que llevábamos bastante tiempo sin estar en contacto, aunque últimamente habíamos coincidido algo más, Toño fue una persona que dejó una huella imborrable en mí. Como músico era excepcional, un gran batería. Actualmente era profesor de este instrumnto en la Univeridad Popular de Albacete. Puedo asegurar que ha sido de los mejores con los que he tenido el gusto de compartir ensayos y escenarios. Y como persona, pues tan grande como físicamente, y era muy grande, en todos los sentidos. Era una persona sencilla, llana, en resumen una persona buena, en toda la extensión de la palabra.
No quisiera despedirme, sin poner algo de música, aunque no tengo ni idea de qué le gustaría escuchar en este momento. Así que me voy a arriesgar y os dejo un tema de The Beatles, fuente primitiva de nuestros inicios musciales. Él lo tocaba de forma magistral con un estilo que me recuerda muchísimo al batería que aparece en este vídeo.
Va por ti, Toñito. Allá donde estés, seguro que montas una banda.
Siempre que me he encontrado con un grupo en el que había una mayoría de temas compuestos por una pareja de músicos, me he decantado por uno de ellos: McCartney antes que Lennon, Jagger antes que Richards, o Gilmour antes que Waters.
En este caso, está clarísima mi predilección. Pero como toda regla tiene su excepción, hay algún que otro tema de Roger Waters que me gusta muchísimo.
Hoy os voy a poner uno de ellos, "Hey you", de su celebérrimo álbum The wall, del cual no creo que haga falta explicar nada. Un tema con una gran carga emocional, integrado a la perfección en el disco y que suena a Waters por todas partes, con la ayuda inestimable de las guitarras de Gilmour. Una pieza de puzzle perfectamente encajada en una obra maestra de la música rock.
Que tengáis un buen sábado. Feliz fin de semana a todos.
En un rinconcito privilegiado del baúl tengo guardado este tema, sin duda el que más me ha gustado de siempre de los Flying Burrito Brothers, curiosamente de su primer álbum, The Gilded Palace of Sin, grabado hace cuarenta años nada menos.
Bueno, pues es de esos temas que me encanta escuchar de vez en cuando, porque me relaja, me hace sentir bien. Una canción al más puro estilo country, genero del que son grandes representantes, con dos figuras destacadas sobre el resto de la formación: Gram Parsons y Chris Hilman, ambos antiguos miembros de The Byrds, y que contribuyeron en gran medida para que el grupo se situara en lugar destacado en aquellos años. Bob Dylan dijo de ellos que eran la mejor banda de la época en su género.
Os dejo con ella porque creo, sinceramente, que es mucho mejor escucharla que lo que yo os pueda contar más.
Por cierto, Gram Parsons tuvo un curioso funeral, no sé si conocéis la historia. Por si os interesa, pinchad aquí. Feliz día a todos.
El skiffle es un tipo de música con influencias del jazz, blues, pop y country, que se hizo muy popular en Gran Bretaña en la década de los 50. Hubo muchísimos grupos que se vieron influenciados por este estilo. Entre ellos The Searches, un grupo que nació en la escena musical conocida como Merseybeat, a la par que TheBeatles, Gerry and the Pacemakers, y tantos otros.
Hay dos datos que me llaman mucho la atención de esta banda. Uno de ellos es que a lo largo de su andadura musical sufrieron un montón de cambios en su formación, manteniéndose sólo su vocalista y guitarrista John McNally, que lleva en esto de la música más de 50 años. Y el otro dato curioso es que éste es de los pocos grupos británicos de aquella época que grabó la mayoría de sus canciones en estéreo.
Durante su carrera musical grabaron muchas canciones que tuvieron bastante éxito, casi todas ellas versiones de grabaciones originales de otros artistas. Entre ellas este "Sweets for my sweet", un tema original del grupo The Drifters.
Ahora bien, de todas ellas, yo me quedo con "Needles and pins" (1964), un tema grabado en principio por la compositora y cantante americana Jackie De Shannon, y que se convirtió en su canción más conocida, llegando al número 1 en las listas británicas. Este tema fue versionado posteriormente por multitud de artistas como Cher, Tom Petty, Steve Nicks o The Ramones, entre otros.
Tiene ese regustillo beat que hizo tan peculiares las canciones de aquella época. Cuando era jovencillo, me encantaba cantarla. A ver si me acuerdo.
Se me ha olvidado un poco la letra, pero no ha salido mal. Feliz martes a todos.
Han pasado a la historia de la música como una de las bandas más volátiles, ya que durante su andadura tuvieron que enfrentarse a diversos contratiempos, desde cambios en su formación o roturas, hasta problemas de salud y abuso de drogas, hasta que en 1999, tras nueve años de carrera musical se separaron definitivamente.
El legado musical de este grupo alternativo inglés es de un E.P. y tres álbumes, aunque el año pasado se reunieron después de una larga ausencia y publicaron un cuarto disco, llamado precisamente Fourth.
La culminación a su carrera musical viene dada por la publicación en 1997 de su disco Urban Hymns. Por aquellas alturas, las relaciones entre su vocalista, Richard Ashcroft y el guitarrista Nick McCabe, no andaban muy bien; de hecho, los temas de este disco son todos de Ashcroft, como canciones de un proyecto en solitario. No obstante, con este trabajo, alcanzan su plena madurez compositiva e instrumental. Se convirieron en una de las bandas más populares del Reino Unido.
De todos los temas, entre los cuales se encuentran "The drugs don't work" o "Lucky man", dos éxitos en las listas británicas, destaca sin duda el majestuoso "Bitter sweet symphony", para el que utilizaron un pasaje sacado de una grabación sinfónica de los Rolling Stones, "The last time", lo cual originó ciertos problemas legales. Así de bien suena.
Corrían los primeros años de la década de los 70 cuando David Byrne conoció a Chris Franz y Tina Weymouth en la Escuela de Diseño de Rhode Island. Poco tiempo después el teclista Jerry Harrison se uniría a ellos, formando una banda de rock bastante peculiar, los cuales grabaron su primer disco en 1976, Talking Heads.
Hasta el año 1988, en el que editaron su último trabajo, Talking Heads fueron una de las formaciones más reconocidas de los 80, combinando una gran variedad de estilos, desde el punk hasta el pop.
En total ocho álbumes de estudio, con un buen número de temas muy conocidos por todos: "Psycho killer", de su primer disco; "Once in a lifetime", del Remain light (1980) o "And she was", publicado dentro del álbum "Little creatures" (1985), uno de sus discos más famosos. Son algunos ejemplos.
A mí me gustan todas; pero para ilustrar esta entrada he elegido una de mis favoritas. Se trata de "Wild wild life", uno de sus mayores éxitos. Un tema fresco, popero, alegre, que invita a bailar. Corresponde a su penúltimo trabajo, True stories, del año 1986. Cuenta además con un vídeo bastante original, que contribuye en gran medida al ambiente jocoso de la canción. Un tema más en mi colección de canciones favoritas, sacado hoy del baúl para compartirlo con todos vosotros.
Este es un descubrimiento relativamente reciente para mí. Se trata de un cuarteto inglés formado en 1999, y con un estilo indie, con clarisímas influencias del sonido Madchester, concretamente de Stone Roses, sobre todo en sus primeras grabaciones, antes incluso de publicar discos.
Hasta el momento han publicado tres álbumes de estudio: Kasabian (2004), Empire (2006) and West ryder pauper lunatic asylum (2009). En el primero de los discos está la canción "Club Foot", un tema que fue el tercer single de la banda y que con el tiempo se ha convertido en una de sus piezas más reconocidas y valoradas.
El segundo álbum llegó directamente al número 1 de las listas británicas, debido a que contenía unos cuantos temas dignos de mención, sobre todo "Empire", tema que daba nombre al disco y que tuvo un gran éxito, acompañado de un buen vídeo.
Y en este mismo año, salió el último disco, del que me quedo con el tema "Fire". Es el que más me llama la atención, sin duda. En este caso, de nuevo un buen vídeo sirve de trampolín a una gran canción.
Os deseo un feliz viernes a todos. Que paseís un buen puente.
Ya va tocando hablar de Mi música en español, que la tengo un poco olvidada últimanente. Y lo quiero hacer con un grupo que me resulta muy interesante. una mezcla de folk, pop y música latina, todo ello aderezado con unas letras muy cuidadas y con carácter ciertamente poético.
Eva Amaral, vocalista del grupo, conoció a Juan Aguirre, guitarrista, en Zaragoza, ambos formando parte de bandas distintas. Al poco tiempo crearon la suya propia y en 1988 sacaban su primer disco, Amaral. A partir de ahí, han desarrollado una exitosa carrera musical con cinco álbumes en el mercado y más de dos millones de copias vendidas de ellos, que no está nada mal.
Tienen muchas canciones de calidad, conocidas por todos. Luego me contáis las que más os gustan a vosotros. No he tenido el placer de verlos en directo, pero tengo entendido que suena muy bien. Espero tener la oportunidad de hacerlo.
Para la entrada de hoy me quedo con un tema de su disco Pájaros en la cabeza (2005), "El unierso sobre mí", una canción que me encanta. Todo un himno con un mensaje precioso, una declaración de intenciones que transmite en su estribilo una explosión de ganas de vivir, ganas de disfrutar de la vida y encontrar un sitio en este mundo tan complicado que nos empeñamos en hacer.
Que tengáis un buen miércoles. Procurad ser felices.
Sólo cuatro discos de estudio componen la discografía de Pixies, banda americana de rock alternativo formada en 1986 y disuelta en 1993. En el año 2004 se reunieron de nuevo, para dar una serie de giras y tocar en diversos festivales.
Su estilo es una mezcla de elementos en principio antagónicos: influencias del punk junto con música melódica; letras con contenidos que rozan la violencia en diversos sentidos y sobre temas tan diferentes como pueden ser la Bilbia o la ciencia ficción; variadísimas influencias musicales entre sus miembros, que van desde The Beatles hasta el country, pasando por Hendrix o Bowie. En definitiva, todo un cóctel musical que se concentra en cuatro álbumes ciertamente heterogéneos.
No conzoco sus últimos trabajos, la verdad. De los primeros, me gustan bastantes temas; pero hoy me quedo con una canción que siempre me ha gustado, sacada de mi Colección de Canciones, publicada en su disco Doolittle (1989) cantada por Black Francis quien la compuso cuando era un adolescente, pero que no se incluyó en sus discos anteriores. Tiene un sonido popero que me gusta. Será porque es lunes y hay mucho curro por lo que me va bien algo ligerito.
Cantante y compositor británico, IanHunter fue el vocalista del grupo Mott the Hoople desde su fundación en 1969 hasta su disolución, cinco años después. Por cierto, uno de los cantantes con más inventiva de la década de los 70. En 1975 comenzó su carrera en solitario, grabando una docena de discos. De toda su discografía, recuerdo por ejemplo "Cleveland rocks", de su álbum You're never alone with a schizophrenic (1979), que fue todo un éxito en Estados Unidos.
Hace ya unos años le perdí la pista después de publicar en 1996 el disco The artful dodger. Pero hace poco me enteré de que publicó uno en 2001, otro en 2007 y otro este mismo año. Así que investigué sobre el tema, y en el de 2007, Shrunken heads, descubrí un tema que me encantó. Un tema que resume la concepción de la música de este rockero que sabe adaptar su propio estilo a las nuevas tendencias, además de recoger la esencia de la música desarrollada a lo largo de toda su discografía.
El tema se llama "When the world was round" (curioso título), y se hizo un vídeo superoriginal para su promoción. Lo he guardado en el bául junto con todas aquellas canciones a las que yo llamo Mis himnos.
Sniff' 'n' the Tears fue un grupo inglés basado casi exclusivamente en el talento de su líder, Paul Roberts, cantante, guitarra y compositor de todos los temas de la banda. Además, era un reputado pintor. De hecho, las portadas de sus discos son todas obras suyas.
A pesar de que el punk era el movimiento de moda a mediados de los 70, Roberts grabó unas maquetas con canciones frescas, próximas al pop de los 60. Poco tiempo después, en 1977, nacía esta banda, publicando dos años después su primer disco, Fickle heart.
En ese primer álbum figuraba "Driver's seat", editado en single en 1978 y considerado un one-hit wonder. Es por ello que a la banda se le conoce por esta canción, número 1 en muchos países. Destaca el comienzo del tema, protagonizado por la acústica de Paul Roberts y la batería de Luigi Salvoni, a los que se van uniendo el resto de la banda, Loz Netto, Mick Dyche (guitarras) y Chris Birkin (bajo). Estos dos últimos, junto con el teclista Alan Feldman, que tocaba para ellos, abandonaron el grupo poco después.
Una de las canciones de mi colección de favoritas para este miércoles nublado y otoñal. Feliz día.