La historia de esta singular guitarra comenzó en el año 1963, cuando
Brian May, con tan sólo 16 años, se dio cuenta que con su guitarra acústica no podía interpretar las canciones que escuchaba en la radio y trataba de emular. Así que decidió cambiarla por una eléctrica; pero en esa época el joven
Brian no disponía del dinero para comprarse las caras
Gibson y
Stratocaster que había en el mercado. Así que, con la ayuda de su padre,
Harold May (ingeniero electrónico), decidió embarcarse en un difícil proyecto: fabricarse su propia guitarra, trabajo que comenzó en agosto del ´63 en un dormitorio de su casa convertido en taller. Para la elección del material,
Brian tuvo que buscar minuciosamente. Por ejemplo, para el mástil utilizaron la madera de una chimenea que un amigo de la familia iba a tirar. La madera era pura caoba, pero estaba vieja y algo apolillada; sin embargo,
Brian logró darle forma a mano.
Así lo explica él mismo:
"El mástil formaba parte de una chimenea que iba a ser destruida. La caoba era de buena calidad, pero era tan vieja que estaba algo apolillada. Rellené los agujeros con madera de cerilla y los cubrí con una capa de Rustin's Plastic Coating. La caja de la guitarra la hicimos de un robusto trozo de roble. En un momento determinado, el escoplo estropeó parte de la madera de la caja, y me sentí tan frustrado que tiré todo por la ventana y empecé de nuevo. Las herramientas utilizadas a lo largo del proyecto, también eran hechas a mano, y las que no estaban, eran herramientas sencillas. En el lugar en el que están unidos el cuerpo y el mástil, sólo utilicé un cortaplumas y una lija, porque no teníamos ninguna herramienta más compleja."
Para los marcadores del diapasón, Brian rebuscó en el costurero de su madre Ruth, y encontró unos botones de madre perla. Esos botones se convertirían en los marcadores de la "Red Special". Las cuerdas las tuvo que comprar, ya que no encontraba ningún sustituto adecuado para ellas. El siguiente paso era construir los fonocaptores (las tomas de sonido). Brian construyó uno con dos cables atados a unos magnetos, pero el resultado no fue el esperado, así que decidió comprar unos fonocaptores Burns Tri-Sonic, aunque a Brian tampoco le gustó el resultado y decidió hacer unos pequeños retoques:
"Los volví a enrollar y los rellené con Araldite, menos el del puente, que probablemente lo haga algún día".
El brazo del trémolo lo hizo con un trozo de acero bastante especial, que él mismo modeló después. Para equilibrarlo utilizó dos resortes de válvulas de motocicleta:
"El brazo de trémolos es una de esas cosas para aguantar los cestos de las bicicletas, y el nudo del final está hecho con una aguja de hacer ganchillos. Los resortes del trémolo son de una motocicleta (ahora no recuerdo de que tipo), pero un amigo mío tenía montones de resortes de válvulas de motocicletas, y usamos eso".
Y por fin, tras un año y medio de trabajo, y con un costo de 8 libras esterlinas, la Red Special emergió. No se parecía a ninguna otra guitarra y su sonido era y es bastante particular, diferente al resto de las guitarras "normales". Antes de tener la guitarra finalmente terminada, Brian la llevó a la escuela, pero se sentía molesto porque no tenía el aspecto de una guitarra comercial. Pero tras pulirla y barnizarla, la guitarra quedó impecable y ya parecía una de las profesionales. Al volver a llevarla a la escuela, sus compañeros quedaron tan impresionados que uno de ellos ofreció cambiársela por su guitarra comprada, obviamente Brian se negó.
Brian continuó buscando el sonido que él perseguía. Tras muchos experimentos, descubrió que tocando con una moneda de seis peniques como púa conseguía un sonido puro y limpio. Y usando esa moneda es como Brian ha tocado en todos los discos y todos los recitales de Queen.
A finales de los 90, el luthier australiano Greg Fryer restauró la Red Special arreglando los problemas que tenía la guitarra a causa del desgaste, dejándola casi como nueva. También fabricó tres copias de la misma (Brian las bautizó George, John y Paul), entregándole dos a Brian, y quedándose con una (Paul).
En 2004, el luthier inglés Andrew Guyton comenzó la fabricación de cincuenta copias de la Red Special: cuarenta en rojo (por el 40º aniversario de la guitarra), y diez en verde (a Brian le gustaban mucho las réplicas de Guild hechas en ese color).
A principios de 2006, la guitarra fue nuevamente objeto de mejoras siendo instalado en ella un nuevo jack e incluso reemplazando el traste 0. El retrasteo completo del mástil fue sugerido para facilitar a Brian la ejecución, pero éste no quiso saber nada al respecto.
(Fuente: Wikipedia)