A pesar de todo mi empeño, al final no he conseguido que este blog haya alcanzado los diez años de existencia. Muy lejos queda ya aquel 2 de julio de 2008, cuando me embarqué, por motivos personales, en una aventura que me llenase y que ocupara el tremendo vacío en el que se había convertido mi vida.
Echando la vista atrás me doy cuenta de lo maravillosa que ha sido esta experiencia, la cual, superado el bache anímico inicial, se convirtió en un medio a través del cual he contado mis experiencias musicales (y no musicales) y compartido mis modestos conocimientos sobre la materia, que se han transformado en inmensos gracias a todos los colegas blogueros que he tenido el gusto de conocer, tanto virtual como personalmente durante estos años. Con esos dos grandes tesoros me quedo.
En la actualidad, tanto mis inquietudes como mi situación personal han cambiado mucho. Y si a eso unimos las últimas tendencias que hacen de las redes sociales unas poderosas armas de comunicación que eclipsan cualquier otra, el resultado es que ya no le encuentro sentido a seguir adelante.
Mi baúl es el testigo silencioso de estos diez años de travesía por la blogosfera musical. Me alegro de que haya tenido que ir cambiándolo por otros de mayor tamaño. A bien seguro seguirá creciendo porque no pienso dejar de cultivarme ahora que mi "fondo de baúl" es tan amplio y rico.
Más de 1.100 entradas, más de 300.000 visitas y más de 8.500 comentarios quedarán para la posteridad como recuerdo perenne de casi una década de estar al pie del cañón, así como de todos aquellos que han tenido a bien visitar el blog y a los que, además de eso. han querido dejar su apreciada y enriquecedora opinión. Gracias de todo corazón.
Como dice la canción, "al final el amor que recibes es igual al amor que das". No hace falta decir que mi desván está abierto a todo el que lo quiera seguir visitando. Siempre seréis bienvenidos.
¡HASTA SIEMPRE!