Los maxi-singles

Uno de los parámetros más peculiares del pop inglés de principios de los 80 fue la masiva edición de dos clases de discos: los singles y los maxi-singles. En el single se presentaba habitualmente el tema comercial que se intentaba vender o llevar al éxito, y tenía una duración de 3 ó 4 minutos por término medio.

Pero paralelamente se desarrolló una nueva modalidad favorecida en gran medida por el tecno pop: el maxi-single.

Gracias a él, el público pudo contar con la variante discotequera, mucho más densa en sonoridad que la del single. El mismo tema estelar editado en single solía aparecer también en versión especial de maxi-single, denominada también "mix version" o "dub version", y realizada con mezclas nuevas en las que se aumentaba el potencial de la sección de ritmo o se añadían bloques instrumentales con la idea de forzar más el ritmo.

Los maxi-singles fueron uno de los recursos comerciales más importantes de la industria inglesa desde comienzos de los 80, pero tuvieron su auge en 1981 para convertirse en un "boom" en el año 1982, año en que la mayoría de los hits británicos contaron ya con una doble edición de los temas en versión reducida y en maxi-single.